El partido en el poder en Angola se enfrenta a una dura prueba electoral
Los angoleños elijen el miércoles un nuevo parlamento, en una de las elecciones más importantes del país, en la que decidirán si renuevan su apoyo al partido que gobernó la nación desde la independencia o abrazan el cambio con una oposición liderada por un carismático líder.
Ocho partidos políticos compiten en los comicios, pero la verdadera contienda es entre el gobernante Movimiento Popular para la Liberación de Angola (MPLA) y su viejo rival y antiguo movimiento rebelde, la Unión Nacional para la Independencia Total de Angola (UNITA).
Hay mucho en juego para el MPLA, liderado ahora por el actual presidente Joao Lourenço, que fue elegido por primera vez en 2017 y busca un segundo mandato.
Pero muchos angoleños están cansados del partido, que ha estado en el poder desde que el país se independizó de Portugal en 1975.
A pesar de la riqueza petrolera que benefició al anterior presidente, el difunto José Eduardo dos Santos y su familia, muchos de los 33 millones de angoleños viven en la pobreza y buscan un cambio.
"Hay mucha expectativa en la sociedad", señala Claudio Silva, analista político en Luanda, la capital. "La gente está muy emocionada porque hay una perspectiva de cambio real", añade.
Para una gran parte de la población, el rostro del cambio es el líder de UNITA, Adalberto Costa Junior, apodado "ACJ", que ha revitalizado a la oposición desde que tomó el timón en 2019 prometiendo un futuro mejor.
Orador talentoso, Costa Junior ha cautivado a los jóvenes votantes urbanos con sus promesas de reforma de gobierno y de lucha contra la pobreza y la corrupción.
Además, logró ampliar la base del partido creando una coalición con otros grupos de la oposición.
- Enfado -
Un 33% de la población tiene entre 10 y 24 años, según datos de la ONU. Sus preocupaciones difieren de la de votantes más mayores y los que nacieron después del final de la guerra civil en 2002 no sienten una lealtad al MPLA, analiza Augusto Santana, especialista en observación electoral.
"Buscan una mejor educación, un mejor trabajo y mejores condiciones de vida", apunta Santana. "Quieren experimentar algo distinto", añade.
Es probable que el MPLA aproveche la repatriación del cuerpo de dos Santos, el difunto presidente que murió en España el mes pasado, para pregonar sus credenciales de liberación, dijo Marisa Lourenço, analista política independiente.
Pero Dos Santos, cuya familia se enfrentó a acusaciones de corrupción tras su muerte, tiene un legado mixto, por lo que es poco probable que su repatriación tenga un "gran impacto" en el resultado, dijo Lourenço.
- Carrera reñida -
Aunque el MPLA sigue siendo el favorito, los analistas y los sondeos predicen una carrera reñida. Sin embargo, la oposición y parte de la opinión pública ya se preguntan si será una elección justa.
En las redes sociales, explica Silva, aparecieron muchas afirmaciones que dicen haber detectado a personas muertas registradas para votar.
El jueves, Lourenço rechazó las críticas de la oposición hacia la comisión electoral, dirigida en su mayoría por personas nombradas por el MPLA.
"Si dicen que el proceso electoral y la Comisión Nacional Electoral están desacreditados, ¿por qué quieren participar?", preguntó el líder a sus seguidores en un mitin.
En las últimas elecciones de 2017 hubo también acusaciones de irregularidades, aunque nunca se abordaron adecuadamente, explica Justin Pearce, profesor especializado en historia angoleña de la Universidad de Stellenbosch, en Sudáfrica. "Eso dejó mucha rabia en la sociedad civil", añade.
En las últimas semanas llegaron a Angola observadores electorales extranjeros. Ante la posibilidad de que se produzcan reacciones violentas, se realizaron recientemente ejercicios de control de multitudes en Luanda, según Paula Cristina Roque, analista política independiente especializada en Angola.
- "Revolución" -
Para muchos angoleños, hay mucho en juego en estos comicios.
Al asumir el cargo, Lourenço, que heredó una economía dependiente del petróleo y en recesión, puso en marcha ambiciosas reformas para diversificar los ingresos y privatizar las empresas estatales.
Pero muchos no han visto los beneficios y casi la mitad de la población vive con menos de 2 dólares al día
"El MPLA tiene que hacerlo mucho mejor, tienen que abordar la pobreza (...) crear empleo, (...) ofrecer mejores servicios -- si no lo hacen se toparán con una revolución", analiza Roque.
Gane quien gane, será muy difícil responder a los problemas sociales y económicos con soluciones rápidas, coinciden los analistas.
H.El-Hassany--DT