Dubai Telegraph - Dos años de desinformación sobre las vacunas contra el covid

EUR -
AED 3.826681
AFN 70.961758
ALL 98.138602
AMD 405.652886
ANG 1.877182
AOA 951.190259
ARS 1045.720247
AUD 1.602814
AWG 1.877897
AZN 1.775245
BAM 1.955573
BBD 2.102956
BDT 124.465544
BGN 1.955294
BHD 0.392554
BIF 3076.642669
BMD 1.041829
BND 1.403837
BOB 7.197164
BRL 6.043693
BSD 1.041579
BTN 87.914489
BWP 14.229347
BYN 3.408604
BYR 20419.848375
BZD 2.099456
CAD 1.456529
CDF 2991.091432
CHF 0.930957
CLF 0.036923
CLP 1018.83097
CNY 7.54601
CNH 7.562783
COP 4573.368835
CRC 530.538382
CUC 1.041829
CUP 27.608468
CVE 110.252195
CZK 25.343745
DJF 185.478458
DKK 7.457729
DOP 62.772709
DZD 139.835759
EGP 51.726992
ERN 15.627435
ETB 127.508391
FJD 2.371151
FKP 0.822333
GBP 0.831435
GEL 2.855018
GGP 0.822333
GHS 16.456089
GIP 0.822333
GMD 73.970229
GNF 8977.957272
GTQ 8.040066
GYD 217.904692
HKD 8.109446
HNL 26.320943
HRK 7.431636
HTG 136.72412
HUF 411.522823
IDR 16610.452733
ILS 3.863061
IMP 0.822333
INR 87.968134
IQD 1364.44153
IRR 43834.955489
ISK 145.523076
JEP 0.822333
JMD 165.930728
JOD 0.738765
JPY 161.242873
KES 134.884334
KGS 90.122166
KHR 4193.512952
KMF 492.268155
KPW 937.645704
KRW 1463.259646
KWD 0.320727
KYD 0.867999
KZT 520.059599
LAK 22878.342838
LBP 93271.167197
LKR 303.144792
LRD 187.998165
LSL 18.795317
LTL 3.076251
LVL 0.630192
LYD 5.086409
MAD 10.478083
MDL 18.997794
MGA 4861.435378
MKD 61.522855
MMK 3383.819949
MNT 3540.134882
MOP 8.35093
MRU 41.443187
MUR 48.810083
MVR 16.10707
MWK 1806.090235
MXN 21.281613
MYR 4.654932
MZN 66.583684
NAD 18.795317
NGN 1767.675143
NIO 38.325549
NOK 11.531328
NPR 140.663663
NZD 1.78585
OMR 0.400943
PAB 1.041579
PEN 3.949541
PGK 4.193513
PHP 61.404399
PKR 289.239507
PLN 4.337676
PYG 8131.055634
QAR 3.798559
RON 4.978071
RSD 116.991412
RUB 108.671879
RWF 1421.834864
SAR 3.911473
SBD 8.734231
SCR 14.272055
SDG 626.663972
SEK 11.501974
SGD 1.402931
SHP 0.822333
SLE 23.68116
SLL 21846.638123
SOS 595.230868
SRD 36.978718
STD 21563.75683
SVC 9.113941
SYP 2617.626467
SZL 18.788818
THB 35.922648
TJS 11.092512
TMT 3.646401
TND 3.309016
TOP 2.440072
TRY 36.018972
TTD 7.074178
TWD 33.946439
TZS 2770.578216
UAH 43.089995
UGX 3848.553017
USD 1.041829
UYU 44.294855
UZS 13362.448044
VES 48.506662
VND 26482.251319
VUV 123.688032
WST 2.90836
XAF 655.880824
XAG 0.033274
XAU 0.000384
XCD 2.815595
XDR 0.792308
XOF 655.880824
XPF 119.331742
YER 260.379151
ZAR 18.862746
ZMK 9377.71492
ZMW 28.772658
ZWL 335.468513
Dos años de desinformación sobre las vacunas contra el covid
Dos años de desinformación sobre las vacunas contra el covid

Dos años de desinformación sobre las vacunas contra el covid

La desinformación sobre las vacunas contra el covid-19 es un fenómeno mundial que alimenta la desconfianza del público y contribuye a socavar las campañas de vacunación.

Tamaño del texto:

El principal mecanismo de la desinformacion es exagerar los efectos secundarios o incluso inventarlos para hacer creer a la gente que las vacunas son más peligrosas que el covid-19.

- Cifras distorsionadas sobre los "efectos secundarios" -

Como cualquier producto sanitario, las vacunas contra el covid pueden tener efectos secundarios, pero innumerables publicaciones en las redes sociales exageran su número y su gravedad.

A menudo se utiliza el mismo procedimiento: utilizar indebidamente las cifras para asustar a la gente, como hizo recientemente la diputada francesa Martine Wonner.

Citó las cifras del sistema estadounidense VAERS, que registra cada vez que alguien señala un posible efecto secundario relacionado con las vacunas.

Pero estos datos no indican ninguna relación entre causa y efecto: pueden "contener información incompleta, inexacta, incidental o no verificable", advierte el propio VAERS en su web.

En la mayoría de países, cualquier ciudadano o trabajador sanitario puede señalar un posible efecto secundario pero son las autoridades sanitarias las que deben determinar si las vacunas son las culpables.

Solo en poquísimos casos (sobre un total de miles de millones de dosis inyectadas) las autoridades sanitarias consideraron posible una relación causal entre una vacuna y un problema de salud, como miocarditis, pericarditis o trombosis atípica.

Pero la relación beneficio/riesgo sigue siendo en gran medida favorable a las vacunas.

- Riesgos sin base científica: sistema inmunitario, sida y ADN -

La teoría de que las vacunas debilitan o incluso destruyen el sistema inmunitario es un argumento clásico de los antivacunas, que volvió a aparecer durante la pandemia.

A principios de enero, algunas publicaciones llegaron a afirmar, sin ningún fundamento científico, que "las personas totalmente vacunadas desarrollarán el SIDA".

Sin embargo, la comunidad científica ha negado en repetidas ocasiones esta afirmación: al contrario, las vacunas se utilizan para reforzar el sistema inmunitario de modo que el organismo pueda combatir rápida y eficazmente los agentes patógenos, en este caso el Sars-CoV-2, el virus responsable del covid-19.

Otra información falsa recurrente es que las inyecciones "te hacen estéril". Expertos de todo el mundo han explicado que esta idea no se basa en ningún dato científico y que no hay nada en la vacuna que pueda provocar esterilidad.

La teoría de que las vacunas de ARN mensajero cambian el genoma es otro de los "grandes éxitos" de la desinformación antivacunas.

Pero es totalmente imposible, entre otras razones porque el ARN mensajero de la vacuna no llega al núcleo de la célula, donde se encuentra el ADN.

- ¿Muchos vacunados entre los infectados? -

Las estadísticas sobre los vacunados, los infectados y los hospitalizados se distorsionan regularmente o se descontextualizan para afirmar que las vacunas son inútiles.

Muchos internautas sostienen por ejemplo, basándose en cifras oficiales, que en Francia hay más infectados vacunados que no vacunados en números absolutos.

Pero esto no demuestra que las vacunas sean inútiles.

Independientemente de las estadísticas, hay que tener en cuenta que en Francia más de tres cuartas partes de la población está vacunada, e incluso más en determinados grupos de edad.

Al mismo tiempo, como se sabe desde el lanzamiento de las vacunas, éstas no evitan totalmente la infección y la transmisión del virus.

Por lo tanto es matemáticamente inevitable que la proporción de personas vacunadas sea muy alta entre los infectados.

En un ejemplo teórico, si el 100% de una población está vacunada, el 100% de los infectados o incluso hospitalizados (aunque sean pocos) también estarán vacunados.

Esto no aporta ninguna información ni buena ni mala sobre la vacuna. Se trata de un cálculo bien conocido por los estadistas, llamado "paradoja de Simpson".

Por lo tanto, es necesario razonar en términos de grupos de población iguales y no en números absolutos.

Así, se observa que los positivos, las hospitalizaciones y las muertes son "claramente más importantes para las personas no vacunadas que para las vacunadas en una población comparable", como explica la unidad de estadísticas del Ministerio de Sanidad francés.

La llegada de la variante ómicron, muy contagiosa, también ha alimentado las malas interpretaciones de las estadísticas.

El hecho de que entre las personas infectadas por el covid-19 las que están vacunadas están infectadas mayoritariamente con la variante ómicron ha llevado a algunos a concluir que las vacunas aumentan el riesgo de infección.

En realidad, si ómicron predomina en los vacunados, es porque las vacunas son menos eficaces contra ómicron que contra delta.

Así que cuando una persona vacunada se infecta en este momento, es sobre todo por ómicron.

Los infectados no vacunados no solo se ven afectados por ómicron sino también --mucho más que los vacunados-- por delta.

Y no están protegidos contra las formas graves de la enfermedad.

I.Viswanathan--DT