Dubai Telegraph - El sida, un ejemplo perfecto de la desinformación científica

EUR -
AED 3.869078
AFN 71.743683
ALL 97.765271
AMD 408.987562
ANG 1.899778
AOA 961.766165
ARS 1051.549899
AUD 1.634491
AWG 1.898778
AZN 1.790054
BAM 1.949108
BBD 2.128393
BDT 125.967517
BGN 1.950036
BHD 0.396986
BIF 3112.982664
BMD 1.053413
BND 1.413162
BOB 7.284061
BRL 6.105483
BSD 1.054081
BTN 88.564074
BWP 14.410661
BYN 3.449689
BYR 20646.901121
BZD 2.124825
CAD 1.48456
CDF 3019.08251
CHF 0.936463
CLF 0.037235
CLP 1027.44669
CNY 7.619965
CNH 7.628703
COP 4714.719871
CRC 536.463257
CUC 1.053413
CUP 27.915453
CVE 109.888763
CZK 25.275642
DJF 187.707327
DKK 7.458809
DOP 63.511945
DZD 140.463773
EGP 51.998879
ERN 15.8012
ETB 127.654237
FJD 2.400745
FKP 0.831477
GBP 0.834188
GEL 2.87057
GGP 0.831477
GHS 16.839345
GIP 0.831477
GMD 74.792269
GNF 9083.812602
GTQ 8.141049
GYD 220.435274
HKD 8.201102
HNL 26.620604
HRK 7.51427
HTG 138.574234
HUF 408.422068
IDR 16780.24218
ILS 3.951158
IMP 0.831477
INR 88.967865
IQD 1380.859105
IRR 44353.967719
ISK 145.518545
JEP 0.831477
JMD 167.405249
JOD 0.746978
JPY 163.732292
KES 136.415161
KGS 91.117401
KHR 4258.420018
KMF 491.416246
KPW 948.071591
KRW 1474.257232
KWD 0.324033
KYD 0.878492
KZT 523.846454
LAK 23162.695542
LBP 94396.106526
LKR 307.952708
LRD 193.955934
LSL 19.177259
LTL 3.110456
LVL 0.637199
LYD 5.148324
MAD 10.509019
MDL 19.153422
MGA 4903.212377
MKD 61.399199
MMK 3421.44538
MNT 3579.498413
MOP 8.45256
MRU 42.079529
MUR 49.731668
MVR 16.285489
MWK 1827.841833
MXN 21.533085
MYR 4.709282
MZN 67.260337
NAD 19.177259
NGN 1753.469495
NIO 38.786833
NOK 11.701568
NPR 141.702838
NZD 1.800506
OMR 0.405574
PAB 1.054091
PEN 4.001661
PGK 4.238488
PHP 61.932804
PKR 292.672469
PLN 4.323256
PYG 8224.761975
QAR 3.842707
RON 4.977167
RSD 117.005807
RUB 105.183805
RWF 1447.743215
SAR 3.95646
SBD 8.831169
SCR 14.319876
SDG 633.635716
SEK 11.595463
SGD 1.415972
SHP 0.831477
SLE 23.912699
SLL 22089.555656
SOS 602.437374
SRD 37.201817
STD 21803.528943
SVC 9.223334
SYP 2646.732426
SZL 19.170364
THB 36.778346
TJS 11.236927
TMT 3.686947
TND 3.325682
TOP 2.467203
TRY 36.265127
TTD 7.157494
TWD 34.285387
TZS 2802.079135
UAH 43.540825
UGX 3868.717556
USD 1.053413
UYU 45.235124
UZS 13492.67568
VES 47.877537
VND 26746.164259
VUV 125.063346
WST 2.940699
XAF 653.706428
XAG 0.034342
XAU 0.000409
XCD 2.846902
XDR 0.794081
XOF 653.712613
XPF 119.331742
YER 263.195093
ZAR 19.188587
ZMK 9482.016784
ZMW 28.940912
ZWL 339.19866
El sida, un ejemplo perfecto de la desinformación científica
El sida, un ejemplo perfecto de la desinformación científica / Foto: Valentina BRESCHI, Paz PIZARRO - AFP

El sida, un ejemplo perfecto de la desinformación científica

Desde las operaciones de desinformación de la KGB hasta los falsos remedios promovidos en internet, y pasando por la censura del Vaticano, la historia del sida está marcada por teorías conspirativas, reavivadas por la epidemia de covid.

Tamaño del texto:

En un video difundido a mediados de abril, en plena campaña de Sidaction -importante evento público francés-, y visto miles de veces antes de ser suprimido en YouTube, un internauta afirma decir "la verdad" sobre el sida y asegura que se trata de "una falsa pandemia" inventada para vender "tratamientos falsos".

La teorías revisionistas conocen "un recrudecimiento desde la epidemia de covid", asegura a la AFP la directora de Sidaction, Florence Thune.

Aunque en los últimos 40 años los cuestionamientos sobre la existencia del virus VIH "siempre han estado ahí", éstos fueron reactivados por "las redes sociales" y la pandemia.

La asociación francesa Sida Info Service comparte la misma constatación. "Tenemos llamadas de personas que se preguntan sobre los orígenes del virus o creen que las terapias están destinadas a hacer ganar dinero a los laboratorios", explica la coordinadora médica Radia Djebbar.

"Lo fascinante de las teorías conspirativas es que no evolucionan, solo se propagan", comenta el profesor Seth Kalichman, especialista en psicología social de la universidad estadounidense de Connecticut.

"La desinformación está como congelada y no se adapta a los avances científicos", añade.

Porque la desinformación sobre el sida es tan antigua como la propia enfermedad.

Ya en 1983, en plena guerra fría, el KGB organizó la operación "Infektion", destinada a hacer creer que el sida fue desarrollado en un laboratorio secreto en Estados Unidos, un rumor difundido por todo el mundo durante casi diez años.

- No se le da tiempo a la ciencia -

La gripe española o más recientemente la epidemia de H1N1 también se vieron acompañadas de desinformación, recuerda el sociólogo Arnaud Mercier. "Siempre es el mismo escenario. Ante lo desconocido hay que encontrar certezas, y no se le da tiempo a la ciencia", detalla.

Esto explica por qué estas teorías se parecen mucho a las que circularon durante el covid.

"Con cada epidemia mortal surge la idea de que es conveniente para alguien, y cada uno ve en ella al enemigo. En el caso del sida, se dice que los países ricos quieren erradicar a los pobres, o bien que los laboratorios buscan hacer dinero", detalla Mercier.

África, duramente afectada por el virus, también ha estado a la vanguardia de la desinformación sobre el tema, y al más alto nivel. Las autoridades aseguraban que el sida no estaba relacionado con el VIH sino con la pobreza.

El expresidente de Sudáfrica, Thabo Mbeki, retrasó durante años el acceso de sus conciudadanos al tratamiento antirretroviral.

Los desinformadores también promueven remedios falsos, que, según ellos, son mucho más eficaces que los medicamentos "asesinos" de "Big Pharma", según su retórica bien elaborada.

La naturópata Irene Grosjean asegura que el sida se puede curar con semillas, verduras y frutas. Entre los promotores de "remedios milagrosos", el mismo Luc Montagnier, codescubridor del VIH, afirmó que el jugo de papaya fermentado podía curar a los seropositivos.

En el caso del sida, la dimensión sexual de la transmisión del virus reforzó el estigma y la desinformación.

"No olvidemos que la enfermedad se llamó durante años el 'cáncer gay'", recuerda Mercier.

En un contexto de homofobia y represión de ciertas prácticas sexuales, las instancias católicas contribuyeron a difundir un mensaje peligroso, como el papa Benedicto XVI, quien afirmó en 2009 que la distribución de preservativos agravaba el problema del sida.

Hoy, 40 años después del descubrimiento del VIH, "el principal problema es el desconocimiento del virus, especialmente entre los jóvenes", señala Djebbar.

"Algunos creen que se arriesgaron al besar a un colega, mientras que otros creen que son inmunes porque son heterosexuales", lamenta.

G.Koya--DT