Una historia viral abre el debate sobre la supuesta tacañería de los suecos
Una historia que se convirtió en viral de una familia sueca que no invitó a los amigos de sus hijos a cenar ha captado la atención del mundo y ha puesto sobre la mesa el debate sobre la supuesta tacañería en Suecia.
El llamado #Swedengate empezó en un foro de discusión de la red social Reddit, donde una pregunta sobre las experiencias más extrañas de la gente con una cultura diferente dio lugar a la siguiente respuesta:
"Recuerdo haber ido a casa de mi amigo sueco. Y mientras jugábamos en su habitación, su madre gritó que la cena estaba lista. Y mira esto. Me dijo que esperara en su habitación mientras comían".
Muchos se hicieron eco de experiencias similares, la discusión se hizo viral y se trasladó a otras redes sociales. ¿Tiene Suecia una extraña inhospitalidad? ¿Los suecos son simplemente tacaños? ¿O hay otra explicación?
Muchos suecos explicaron que no era una experiencia inusual. Otros dijeron que era raro, mientras que algunos aseguraron que nunca habían oído hablar de esta práctica.
"Cuando era niña, era muy común ir a jugar a casa de tus amigos y que luego dijeran: 'Oh, me voy a cenar. Volveré en 30 minutos'. Y te dejaban en su habitación", dijo la cantante pop sueca Zara Larsson, de 24 años, en un vídeo publicado en TikTok.
Tradicionalmente, Suecia ha sido elogiada por defender los derechos humanos, por sus políticas igualitarias y sus diseños minimalistas.
Sin embargo, en los últimos años ha aparecido en la prensa por su controvertida estrategia contra el covid, los tiroteos entre bandas rivales o los atentados.
- "Relación entre familias" -
Para Richard Tellstrom, profesor asociado de la Universidad Sueca de Ciencias Agrícolas, el debate del #Swedengate es fascinante ya que revela "mucho sobre nosotros mismos y sobre quiénes somos".
Tellstrom explicó que, aunque pueda parecer extraño a los extranjeros, esta práctica no es una señal de que los suecos sean tacaños.
"Se trata de la relación entre las familias y de no acabar en deuda unos con otros", dijo el historiador de la alimentación a la AFP.
Según él, en la mentalidad sueca, puede haber varias razones para no invitar a cenar a los compañeros de juego de tus hijos. Una de ellas podría ser que la familia del niño visitante estuviera planeando una cena propia y entonces "arruinarías la oportunidad de que estuvieran juntos como familia" para esa noche, según Tellstrom.
Pero también hay razones históricas. Cuando Suecia era mucho más pobre y la gente tenía más hijos, los padres que tenían dificultades para llegar a fin de mes enviaban a sus hijos a comer a casa de sus amigos.
Por ello, el mero hecho de ofrecerse a alimentar al hijo de otra persona podía interpretarse como un insulto. "Si te ofreces, estás admitiendo que la otra familia ha pasado por momentos difíciles", dice el historiador.
En paralelo también habló de la relación de los suecos con la deuda, y el hecho de que siempre hay que tener cuidado de no acabar en deuda con otra persona.
"Si tus hijos comen mucho en mi casa, estarás en deuda conmigo, y eso debe evitarse porque es malo para nuestra relación como adultos", señaló.
G.Koya--DT