Cuba ratifica en referendo Código de Familias que legaliza matrimonio gay
Cuba dio un salto en materia de derechos sociales al ratificar con una clara mayoría el Código de las Familias, que legaliza el matrimonio y la adopción para personas del mismo sexo, así como el vientre subrogado.
La legislación, que sustituirá una de 1975, fue objeto de una intensa campaña mediática por parte del gobierno a su favor. Fue aprobada con el 66,87%, según un recuento parcial pero cuya tendencia es irreversible.
"Ganó el Sí. Se ha hecho justicia", dijo el lunes el presidente Miguel Díaz-Canel en su cuenta de Twitter.
"Aprobar el #CódigoDeLasFamilias es hacer justicia. Es saldar una deuda con varias generaciones de cubanas y cubanos, cuyos proyectos de familia llevan años esperando por esta Ley. A partir de hoy seremos una nación mejor", añadió el mandatario.
El Consejo Nacional Electoral (CEN) informó que votaron 6.251.786 electores, equivalente al 74,01% del padrón.
Del total de 5.891.705 sufragios válidos, 3.936.790 fueron por el Sí (66,87%) y 1.950.090 por el No (33,13%).
El nuevo Código de las Familias define el matrimonio como la unión "entre dos personas", abriendo la puerta al casamiento homosexual y a la adopción para parejas del mismo sexo.
También permitirá reconocer legalmente a varios padres y madres, además de los biológicos, así como la gestación subrogada, sin fines de lucro. Suma diversos derechos que favorecen a los niños introduciendo el concepto de "autonomía progresiva", así como a ancianos y personas con discapacidad.
- "Voto de castigo" -
"Con esta legislación Cuba se coloca a la vanguardia" en estos derechos, dijo a AFP el académico cubano Arturo López-Levy, de la Universidad Holy Names, en California.
Sin embargo, la participación en la jornada del domingo fue menos nutrida que la registrada en 2019 para aprobar la nueva Constitución, cuando alcanzó un 90,15%.
Y se trata del porcentaje más alto de voto en contra que haya recibido el gobierno cubano.
El referendo careció de una campaña por el no por, falta de vías legales para la oposición, que de manera desarticulada se expresó en contra por considerar que si no, validaba al gobierno comunista.
El experto consideró que, aunque con este resultado el gobierno revolucionario es menos fuerte, "de ninguna manera es un voto para la oposición".
El presidente Díaz-Canel había previsto este descontento.
"Tenemos que acostumbrarnos que, en temas tan complejos, donde hay diversidad de criterios", en el país "también puede haber (...) un voto de castigo", admitió el domingo luego de depositar su boleta y aseguró que esa postura "también es legítima".
El politólogo y opositor Manuel Cuesta Morúa calificó esta victoria como "pírrica".
"Tenemos nuevas reglas de juego para la familia (...) Pero pierde el régimen", dijo Cuesta a AFP. "Primero porque la suma del voto No y la abstención es casi igual, si no mayor, a la suma de los que votaron Sí".
- "Al final ganamos" -
El triunfo se debe a que "muchos activistas de la comunidad LGBTI que quieren cambios profundos" veían una oportunidad "casi única e inmediata para adelantar algunos derechos", dice Cuesta, pero el referendo deja una sociedad dividida por la falta de un debate abierto y profundo y por la crisis que vive el país, agrega.
La embajada de Estados Unidos celebró en un tuit el código que favorece el matrimonio igualitario y la adopción para todas las familias.
Pero dijo que "esto no cambia la naturaleza antidemocrática del régimen cubano".
"El pueblo cubano merece que se respeten todos sus derechos humanos y su capacidad de elección democrática en todos los ámbitos", agregó.
El Código de las Familias es aceptado por una sociedad marcada por el machismo que se vivió en las décadas de 1960 y 1970, cuando los homosexuales fueron marginados, cuya discriminación se prohibió en la Constitución de 2019.
"Y al final ganamos!! #Cuba tiene Código de las Familias. Empieza el camino de hacerlo cumplir", dijo en Twitter Maykel González, periodista y activista opositor LGBT.
Esta es la primera vez que una ley diferente a la Constitución es sometida a referendo en Cuba.
El polémico proceso llega tras más de un año de las históricas manifestaciones del 11 de julio de 2021, por las que unas 500 personas fueron condenadas a prisión. Así como en medio de la peor crisis económica desde hace tres décadas con escasez de alimentos, medicinas y combustible y cotidianos apagones.
G.Gopalakrishnan--DT