Justicia británica examina responsabilidad de empresa minera BHP en desastre ecológico en Brasil en 2015
El Tribunal Superior de Justicia británico examina en Londres desde el lunes si la megaempresa minera australiana BHP, a la que se reclaman indemnizaciones por unos 47.000 millones de dólares, es responsable del desastre medioambiental ocurrido en 2015 en Brasil.
En un proceso que podría durar hasta marzo de 2025, y que tendrá como escenario el Tribunal de Tecnología y Construcción, se analizará la ruptura en 2015 de una represa en Brasil, por lo que 620.000 damnificados le reclaman a BHP esa cantidad de 36.000 millones de libras (unos 46.800 millones de dólares).
El 5 de noviembre de 2015, el dique minero Fundao, cerca de la localidad de Mariana, en el estado de Minas Gerais, se rompió liberando casi 40 millones de metros cúbicos de residuos minerales altamente contaminantes.
El lodo recorrió 650 km por el Rio Doce hasta el Atlántico, arrasó localidades, mató a 19 personas y privó de sus hogares a más de 600 personas, devastando la flora y la fauna.
Los indígenas Krenak figuran entre los más de 620.000 participantes, además de 46 municipios, en esta demanda colectiva, la mayor presentada en la historia judicial británica.
"Realmente esperamos que la justicia inglesa haga lo que la justicia brasileña no ha hecho hasta ahora", explicó a AFP Monica dos Santos, una abogada de 39 años cuya familia perdió su casa en la catástrofe.
BHP está en el punto de mira de este proceso porque es copropietaria, junto con el grupo brasileño Vale, de la empresa minera brasileña Samarco, que gestiona la presa.
En el momento de los hechos, BHP tenía dos sedes globales, una de ellas en Londres, que ya no mantiene, y la otra en Australia, donde tiene ahora registrada su domiciliación.
- Demanda en Países Bajos -
En julio pasado, BHP y Vale acordaron pagar cada una el 50% de las eventuales indemnizaciones en los procedimientos abiertos en Brasil, Australia, Países Bajos y Reino Unido.
En marzo de 2024 se presentó una última demanda, en Países Bajos, contra Vale y una filial neerlandesa suya, llamada Samarco Iron Ore Europe BV.
Emanuele Vitória, de 5 años, fue una de las 19 personas que murieron arrastradas por el lodo.
Su madre, Pamela Rayane Fernandes de Sena, de 30 años, intenta mantenerse "firme y fuerte" para buscar “justicia”.
"Algo así no puede quedar impune", dijo a AFP mientras mostraba fotos de su niña.
"No estoy por dinero, sino para hablar por su vida, porque la vida de Emanuele no tiene precio para mí. Entonces no voy a desistir", añadió.
BHP dice ser "consciente de los impactos" de la catástrofe y afirma mantener una actitud "inquebrantable" en su deseo de ofrecer compensaciones, pero señala que esta demanda británica es "inútil", considerando que la cuestión está "ya cubierta" por los procedimientos brasileños.
El grupo asegura que más de 430.000 personas ya han recibido indemnización a través de la fundación Renova, que gestiona programas de compensación y rehabilitación en Brasil, incluidos más de 200.000 demandantes del juicio en Londres.
- "Un par de cientos de libras" -
"La mayoría de esos 200.000 solo han recibido un par de cientos de libras", dijo Tom Goodhead, director general de Pogust Goodhead, el gabinete londinense de abogados que defiende a los demandantes.
BHP y Vale elevaron el viernes a 170.000 millones de reales (unos 29.850 millones de dólares) una propuesta de compensación global, con la esperanza de poner fin a la mayoría de los procedimientos en Brasil. Esta cantidad aún está en negociación.
"El proceso inglés ha empujado a BHP a aceptar que necesitaban hacer más en Brasil, pero esta propuesta solo llega a la mitad en el mejor de los casos", afirmó Goodhead.
Si este juicio londinense debe durar hasta marzo, la decisión no se espera antes del segundo trimestre del próximo año, estima BHP.
Si se reconociera la responsabilidad de BHP, habría otro juicio, probablemente a finales de 2026, para evaluar el importe a pagar a cada demandante.
"Para muchos de los clientes que representamos, esta es su oportunidad de rendición de cuentas y justicia, más allá del daño financiero o ambiental causado", apuntó Goodhead.
T.Jamil--DT