Dubai Telegraph - Las devadasis, o cuando la prostitución se disfraza de religión en India

EUR -
AED 3.896071
AFN 72.130551
ALL 98.649047
AMD 412.597671
ANG 1.911906
AOA 968.990719
ARS 1062.604762
AUD 1.621287
AWG 1.903478
AZN 1.780298
BAM 1.964381
BBD 2.141956
BDT 126.773765
BGN 1.957762
BHD 0.399798
BIF 3074.564963
BMD 1.060743
BND 1.421148
BOB 7.357346
BRL 6.123093
BSD 1.060864
BTN 89.589875
BWP 14.433046
BYN 3.471665
BYR 20790.572112
BZD 2.138401
CAD 1.480024
CDF 3044.33428
CHF 0.935507
CLF 0.037339
CLP 1030.289842
CNY 7.678083
CNH 7.672236
COP 4659.199033
CRC 539.270862
CUC 1.060743
CUP 28.109702
CVE 110.980299
CZK 25.286428
DJF 188.514852
DKK 7.45915
DOP 64.161703
DZD 141.327807
EGP 52.558249
ERN 15.911152
ETB 130.073716
FJD 2.400479
FKP 0.837263
GBP 0.835611
GEL 2.911696
GGP 0.837263
GHS 16.865687
GIP 0.837263
GMD 74.766985
GNF 9154.216134
GTQ 8.190007
GYD 221.839024
HKD 8.25617
HNL 26.714829
HRK 7.566558
HTG 139.358738
HUF 408.365365
IDR 16816.602757
ILS 3.971153
IMP 0.837263
INR 89.531682
IQD 1390.104324
IRR 44662.603968
ISK 145.470125
JEP 0.837263
JMD 168.254961
JOD 0.752387
JPY 164.049282
KES 137.382069
KGS 91.758976
KHR 4296.011351
KMF 493.007062
KPW 954.668725
KRW 1474.465045
KWD 0.326115
KYD 0.884062
KZT 526.424383
LAK 23283.319803
LBP 94989.578538
LKR 308.648218
LRD 191.729793
LSL 19.17825
LTL 3.1321
LVL 0.641633
LYD 5.165982
MAD 10.580883
MDL 19.280219
MGA 4947.307016
MKD 61.534621
MMK 3445.25343
MNT 3604.406271
MOP 8.50475
MRU 42.339519
MUR 49.091221
MVR 16.388592
MWK 1841.450534
MXN 21.326964
MYR 4.736175
MZN 67.845196
NAD 19.236822
NGN 1781.359402
NIO 39.038261
NOK 11.637273
NPR 143.344201
NZD 1.791736
OMR 0.408407
PAB 1.060864
PEN 4.025533
PGK 4.209134
PHP 62.458169
PKR 295.019325
PLN 4.332435
PYG 8262.089959
QAR 3.861902
RON 4.97616
RSD 116.965016
RUB 106.685326
RWF 1454.279304
SAR 3.982147
SBD 8.877913
SCR 14.446549
SDG 638.035263
SEK 11.570993
SGD 1.417647
SHP 0.837263
SLE 23.97887
SLL 22243.265325
SOS 606.208915
SRD 37.697234
STD 21955.248302
SVC 9.282547
SYP 2665.149653
SZL 19.178561
THB 36.606089
TJS 11.276658
TMT 3.72321
TND 3.338689
TOP 2.484371
TRY 36.586825
TTD 7.20367
TWD 34.304975
TZS 2815.194113
UAH 43.79671
UGX 3906.062223
USD 1.060743
UYU 45.53892
UZS 13651.768587
VES 48.565083
VND 26948.187985
VUV 125.933597
WST 2.961162
XAF 658.853598
XAG 0.033896
XAU 0.000402
XCD 2.866712
XDR 0.806925
XOF 656.069696
XPF 119.331742
YER 265.081451
ZAR 19.13194
ZMK 9547.967398
ZMW 29.306845
ZWL 341.558966
Las devadasis, o cuando la prostitución se disfraza de religión en India
Las devadasis, o cuando la prostitución se disfraza de religión en India / Foto: Manjunath Kiran - AFP

Las devadasis, o cuando la prostitución se disfraza de religión en India

Huvakka Bhimappa no tenía ni 10 años cuando sus padres la consagraron a la diosa hindú de la fertilidad. A modo de "iniciación" fue violada por su tío, y comenzaron entonces años de esclavitud sexual.

Tamaño del texto:

La niña se convirtió en lo que se conoce en el sur de India como una "devadasi", lo que implicaba que su matrimonio con un mortal quedaba proscrito a partir de ahí. Siguiendo la costumbre, entregó su virginidad a un hombre mayor.

"En mi caso fue el hermano de mi madre", a cambio de un sari y unas joyas, cuenta a AFP Huvakka Bhimappa, que ahora tiene cerca de 50 años.

Poco después, y bajo el pretexto de su devoción a la diosa Yellamma, fue sometida a otros hombres, que sucesivamente pagaron por los servicios sexuales prestados. Y así prostituyéndose pudo mantener a sus parientes durante años.

Cuenta que en una ocasión se enamoró de un hombre, pero habría sido impensable que ella le hubiera pedido matrimonio. Y es que su situación de mujer consagrada a la diosa Yellamma la condenó a la marginación dentro de su comunidad.

"Si no hubiera sido una devadasi, habría tenido una familia, niños y dinero. Habría vivido bien", lamenta esta mujer, más allá de que lograra escapar de su esclavitud sexual.

A falta de educación académica, sólo encontró trabajo en el campo, y gana un dólar al día.

- "Dos hijos con 17 años" -

La figura de la devadasi, presente en la cultura del sur de India desde hace siglos, ocupaba antaño un lugar respetable en la sociedad.

Muchas de ellas eran mujeres instruidas, formadas en la danza y la música clásica, llevaban una vida cómoda y elegían sus compañeros sexuales.

"Esta noción de esclavitud sexual más o menos autorizada por la religión no formaba parte del sistema original", cuenta a AFP la historiadora Gayathri Iyer.

Según ella, fue en el siglo XIX, durante la administración colonial británica, cuando el pacto entre la devadasi y la diosa se transformó en una empresa de explotación sexual.

India prohibió esta práctica a nivel nacional en 1988, pero según la comisión india de derechos humanos, hay aún 70.000 devadasis en el estado de Karnataka.

Numerosos hogares de Saundatti, una pequeña ciudad del sur del país que cuenta con un templo consagrado a Yellamma, estiman que el hecho de tener una devadasi en la familia les puede dar buena suerte y proteger a sus miembros.

En ese templo precisamente fue consagrada a la diosa Sitavva D. Jodatti, para cubrir las necesidades económicas de sus padres. Tenía ocho años.

"Cuando la gente se casa, hay una novia y un novio. Cuando me di cuenta de que estaba sola, me eché a llorar", cuenta a la AFP.

Un día su padre cayó enfermo. La sacaron entonces del colegio, y se vio obligada a prostituirse para financiar su atención médica.

"Con 17 años ya tenía dos hijos", cuenta esta mujer que ahora tiene 49 y dirige una organización que ayudó a antiguas devadasis a salir de su condición.

- "Demasiado joven para dar a luz" -

Según Nitesh Patil, un funcionario del distrito responsable de la administración de Saundatti, no hay "casos recientes".

Muchas devadasis que lograron dejar atrás su condición se encontraron sin recursos y sobreviven gracias a empleos manuales o agrícolas mal pagados.

Rekha Bhandari, una antigua devadasi, cuenta que todas se han visto sometidas "a la práctica ciega de una tradición" que arruinó sus vidas.

Ella tenía 13 años cuando falleció su madre. Fue obligada a entrar en la orden de las devadasis, y su virginidad fue para un hombre de 30 años. Poco después quedó encinta.

"Era difícil tener un parto normal. El médico le gritó a mi familia, diciéndole que era demasiado joven para dar a luz", cuenta Bhandari, de 45 años. "Yo no entendía nada".

A algunas horas del templo de Yellamma, la antigua devadasi Vatsala recuerda haber sido estafada por un cliente, y haberlo maldecido.

"Después de estar conmigo me arrojó algo que pensé que era dinero. Fue en plena noche, no veía bien y luego me di cuenta de que no era más que papel", explica a AFP Vatsala, de 48 años.

Poco después, al enterarse de que el estafador había muerto, se dijo que "Yellamma también se enfadó".

S.Mohideen--DT